jueves, 10 de mayo de 2012

El monotema

Se despega de la bata blanca del cuidador y después deja caer una mirada fofa por el patio de butacas. Otra vez son todo gente con corbatas. Tras de sí, la pantalla negra con la línea luminosa y, delante, cuatro botones  nuevos: uno rojo, otro amarillo, otro verde y el del final burdeos; su color favorito. Así que esta vez ni siquiera duda: en medio de la expectación extiende el brazo peludo y presiona este último. Plof. Pues vaya, parece que ha acertado porque de golpe se encienden luces de colores, suena la sirena y todo el mundo se vuelve como loco. Unos apuntan cosas, otros llaman por teléfono... La línea luminosa que marca los precios empieza a subir como un cohete y él, con importancia, hace un canutillo con el morro. Después, en medio de la algarabía, el cuidador lo baja de su butaca y se lo lleva, con ese bamboleo tan gracioso, otra vez directo hacia su jaula.

domingo, 6 de mayo de 2012

El pequeño demiurgo

Bajo por la calle a toda velocidad y, cuando paso por la puerta de  mi casa, pico el remo. Hago un giro de noventa grados con la piragua y remo con fuerza buscando encarar la entrada de la cochera. Sorteo una lavadora que pasa flotando, entro al jardín, cruzo entre el roble canadiense y el pino piñonero y con una mano me agarro al dintel de la ventana. Lo de dentro ya lo hago nadando a rana. Al final confirmo mis sospechas cuando consigo pasar a la cocina: ahí está el pequeño en pañales, subido en una silla, con el barquito que le regaló mi suegra en una mano y el grifo, a saber desde cuando, abierto como un bazoka. <<¡Cierra ese grifo, castrón!>> Apenas me oye bajo el trueno de la cascada y se gira. Da la vuelta al barco y la casa se vuelve de golpe. Me veo bajo el agua, el pelo de espanto, todos los muebles girando a mi alrededor y un volaverunt remolino que gira cada vez más pequeño, más rápido, más pequeño en dirección a la chimenea de la sala. Salgo como una peonza al espacio exterior mientras me sigue una culebra de agua girando, girando, girando y adiós. Adiós muy buenas.